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martes, 31 de mayo de 2011

We Have All The Time In The World, Louis Armstrong, 1969


Hoy es uno de esos días en los que puedo decir que me iré a dormir con un buen regusto en el cuerpo. Movido, sí, pero en ese sentido que te da la convicción de que ha merecido la pena. Así que me he decidido por una canción que me produce exactamente la misma sensación. 

En realidad, no es la primera vez que se cita al tema de hoy en las Píldoras. Hace varios meses traíamos por aquí The Man With The Golden Gun, de la escocesa Lulu, mi tema favorito de todos los que pasaron por las pelis de James Bond... junto a este que Louis Armstrong interpretó para 007 al servicio de Su Majestad

Curiosamente, si el primero era el que menos le gustó a John Barry, el autor de casi todos los clásicos musicales Bond, We Have All The Time In The World le provocaba el efecto contrario. La consideraba, junto a Goldfinger, su composición predilecta.

Como nota a pie de página, aquella película, además de la interpretación de Armstrong, supuso otra rara avis: fue la primera vez que Sean Connery no hacía de agente secreto, papel que ocupó un modelo australiano, George Lazenby. Pero la cosa resultó sosita a pesar de tanto encaje y chorrera, así que el muy machurrio Connery volvería a coger brevemente la Walter PPK hasta su relevo definitivo por el más histriónico Roger Moore. 

Ah, no le hagáis mucho caso al clip, casi más pensado para un karaoke que para una promoción seria. Tuvo que ser montado ya en los noventa, que fue cuando la canción conseguiría entrar en listas, más de un cuarto de siglo después de su lanzamiento a causa de un anuncio de cerveza. Eso sí, lo hizo a lo grande: alcanzó el tercer puesto de las listas británicas. Todo lo bueno se hace esperar, desde luego.

We Have All The Time In The World (por Goear)



Letra de la Píldora.

Hasta la próxima.

domingo, 13 de junio de 2010

What a Wonderful World, Louis Armstrong, 1968


Louis Armstrong es, sin duda, uno de los grandes maestros de la historia del jazz y, muy posiblemente, el más popular. Sin embargo, dicha popularidad entre el gran público tal vez -sólo tal vez- se deba mucho menos a su larguísima carrera como jazzman que a una canción que interpretó ya en el ocaso de su vida y que tenía, en su versión de single, bastante más de pop melódico que de jazz.

Por supuesto, esta canción era What a Wonderful World, tema lanzado el 1 de enero de 1968 y que se convirtió en todo un éxito y, con el tiempo, en un estándar. Curiosamente, en Estados Unidos, donde la discográfica ABC no creía mucho en la canción, el tema vendió inicialmente unas... 1.000 copias. En términos de negocio esto es la nada, para que nos entendamos.

La sorpresa vino del otro lado del Atlántico. En Gran Bretaña la canción gustó enormemente, y su millón de copias la catapultó al número uno. Pero ni aún así consiguió apoyo real discográfico en Estados Unidos y, a pesar del bombazo británico, el LP del mismo nombre ni siquiera entró en listas.

La redención en su país natal vino dada parcialmente a la muerte del músico en 1971, y totalmente mucho más tarde, en 1987. La canción pretendía responder al clima de tensión social norteamericano de finales de los sesenta mediante una bellísima letra en la que se invitaba a fijarse en las pequeñas grandes cosas de la vida. Y ese texto, junto al contexto antitético en el que se creó, hicieron perfecto al tema para formar parte de una banda sonora.

"Gooooood Moooooorning, Vieeeetnaaaaaammmmm!!!" era el grito de guerra del sargento Adrian Cronauer durante su estancia como locutor radiofónico en el ejército norteamericano en Vietnam, un personaje real que el actor Robin Williams interpretó de forma más que convincente en el film del mismo nombre que aquella exclamación. En su excelente banda sonora se incluyó el tema protagonista de hoy, con enorme éxito, hasta el punto de que prácticamente supuso el descubrimiento real para muchos de la figura de Armstrong. Aunque en realidad tuviera relativamente poco que ver con el jazz: como dirían (más o menos) aquellos dos galos, estos yanquis están majaretas...

Louis Armstrong – What A Wonderful World (por Spotify)



Letra de la Píldora.

Hasta la próxima.