Hace unos días, me permitía una reflexión sobre lo grande que es disfrutar de las pequeñas cosas. Ciertamente, la vida se puede (y se debería) entender como la suma de todos y cada uno de sus momentos. Pues bien, si existe una canción que describe esto a la perfección, y que sirve hasta para encajar mejor los peores momentos, es la Píldora de hoy, del grupo norteamericano Eels.
De hecho, se puede escuchar como una canción pop que, de tan simple que es, sólo puede inspirar buen rollo, tanto por su letra como por su melodía, sencilla y casi tontorrona. Y en cuanto a su vídeo, es una divertidísima pieza que parece hecha a lo cutre y en plan hombre-orquesta: como dice al principio el propio cantante, Mr. E, "nos gastamos todo el dinero en el disco, y no quedó nada para el vídeo. Pero necesitábamos un vídeo". En la filmación colabora hasta el adormecido chucho de la casa, no se sabe bien si para sumarse a los coros o... para quejarse del ruido.
Lo meritorio de una canción como esta no es en sí el tema. Cualquiera en un estado de ánimo soleado la hubiera podido suscribir. Lo meritorio es que su compositor, el líder de la banda -quien protagoniza todo el vídeo con un sentido del humor impagable- había sido una persona golpeada bastante duro en la vida: pocos años antes, había perdido a su padre, su hermana se había suicidado y su madre padecía un cáncer terminal. Desde luego, quien no sale del bache es porque no quiere...
En todo caso, para cuando se compuso y se lanzó Hey Man (Now You're Really Leaving) Mark Oliver Everett (el auténtico nombre de Mr. E) ya había salido del golpe y hacía algún tiempo que su banda, en la que él era el único miebro estable, se había ganado el respeto y las ventas en los circuitos de rock alternativo. La canción, como otras del grupo, tuvo una acogida muy buena en Europa, especialmente en Gran Bretaña.
En todo caso, aquí os dejo con esta Píldora de buen rollo, amor por las pequeñas cosas y ganas de tirar p'alante.
De hecho, se puede escuchar como una canción pop que, de tan simple que es, sólo puede inspirar buen rollo, tanto por su letra como por su melodía, sencilla y casi tontorrona. Y en cuanto a su vídeo, es una divertidísima pieza que parece hecha a lo cutre y en plan hombre-orquesta: como dice al principio el propio cantante, Mr. E, "nos gastamos todo el dinero en el disco, y no quedó nada para el vídeo. Pero necesitábamos un vídeo". En la filmación colabora hasta el adormecido chucho de la casa, no se sabe bien si para sumarse a los coros o... para quejarse del ruido.
Lo meritorio de una canción como esta no es en sí el tema. Cualquiera en un estado de ánimo soleado la hubiera podido suscribir. Lo meritorio es que su compositor, el líder de la banda -quien protagoniza todo el vídeo con un sentido del humor impagable- había sido una persona golpeada bastante duro en la vida: pocos años antes, había perdido a su padre, su hermana se había suicidado y su madre padecía un cáncer terminal. Desde luego, quien no sale del bache es porque no quiere...
En todo caso, para cuando se compuso y se lanzó Hey Man (Now You're Really Leaving) Mark Oliver Everett (el auténtico nombre de Mr. E) ya había salido del golpe y hacía algún tiempo que su banda, en la que él era el único miebro estable, se había ganado el respeto y las ventas en los circuitos de rock alternativo. La canción, como otras del grupo, tuvo una acogida muy buena en Europa, especialmente en Gran Bretaña.
En todo caso, aquí os dejo con esta Píldora de buen rollo, amor por las pequeñas cosas y ganas de tirar p'alante.
Eels – Hey Man (Now You're Really Living) (por Spotify)
Letra de la Píldora.
Hasta la próxima.
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