lunes, 30 de abril de 2012

Magnetic Fields Part 2, Jean Michel Jarre, 1981


Que a veces las Píldoras vienen de dos en dos -alguna vez incluso de tres en tres- es algo varias veces contrastado. ¿Cómo si no explicar que tras el Lucifer de ayer hoy aparezca esta otra joya de los sintetizadores de finales de los setenta y principios de los ochenta?

En 1981, Jean Michel Jarre -hijo no muy bien avenido del compositor Maurice Jarre, el autor de bandas sonoras como Doctor Zhivago, Lawrence de Arabia o Ghost- ya era toda una celebridad por si mismo. Sus dos discos más recientes, Oxygene y Equinoxe se habían convertido en números uno e incluso atesoraba un Guinness por un multitudinario concierto el Día de la Bastilla de 1979, en el que reunió a un millón de asistentes en la Plaza de la Concorde. 

Su siguiente trabajo siguió aumentando la estela del francés, en un estilo aún más futurista si cabe y, desde luego, más cargado de sintetizadores y efectos de sonido todavía. Era Jarre en estado puro. Como primer single promocional, se decidió por la segunda pieza del álbum, Magnetic Fields Part 2, que le sirvió perfectamente. El LP volvió a alcanzar el número uno. 

Como nota a pie, por aquella época, Jarre titulaba sus discos tanto en francés como en inglés. Para este trabajo quiso hacer un juego de palabras en su propio idioma. Les Chants Magnétiques (los cantos magnéticos) -se pronunciaba prácticamente igual que Les Champs Magnétiques (los campos magnéticos) y como doble sentido era perfecto... lastima que no en inglés, donde ambas expresiones se escribían totalmente diferentes. Como fuera que Magnetic Fields (campos magnéticos) sonaba mucho mas vendible, se convirtió en la opción preferida. Aunque sostuvo Les Chants Magnetiques como opción en francés. 

Una postrer reflexión. No me digáis por qué, pero a pesar de toda la parafernalia digital y electrónica, el tema de hoy suena muy, pero que muy francés. Me gustaría saber que pensáis vosotros...  




Letra de la Píldora (de nuevo, otra instrumental)

Hasta la próxima. 

domingo, 29 de abril de 2012

Lucifer, The Alan Parsons Project, 1979


Hoy domingo ha sido un día bastante completo entre amigos, caminatas por la comarca, barbacoas y demás eventos lúdico-festivos propios de un día soleado de primavera. Así que entenderéis que ando poco menos que para el arrastre. 

Por lo tanto, os dejo sin más preámbulos con la Píldora, uno de los temas preferidos por mi padre (y por mí) del bueno de Alan Parsons. Que su título no asuste: casi suena más a música celestial que no infernal. O, más bien incluso, suena a música de informativos radiofónicos, que también tiene su gracia. 

Como sea, Lucifer fue todo un hit en Europa que aquí os posteo para que lo rememoréis. Por cierto, os recomiendo mejor la versión en estudio del link de Goear, suena mejor. O tal vez es la costumbre. 



Letra de la Píldora (no tiene, una peculiar facultad de las canciones instrumentales)

Hasta la próxima. 

sábado, 28 de abril de 2012

Time Warp, The Rocky Horror Picture Show, 1975


The Rocky Horror Picture Show es una de las películas icónicas del cine musical, sin más. Un icono que va más allá de su surrealista historia en la que se parodiaba a filmes de ciencia ficción clásicos... con un transfondo de transexualidad que empezaba por su propio protagonista -el profesor Frank-N-Furter-, un científico loco con aspecto de cabaretera interpretado por Tim Curry y cuyo número estrella se titulaba nada menos que Sweet Transvestite.

La cinta recogía en celuloide el musical The Rocky Horror Show, estrenado en 1973 con un enorme éxito, y protagonizado precisamente por Curry. Si Jesucristo Superstar y Hair habían abierto las puertas de los musicales al rock, The Rocky Horror Show las desinhibieron a la manera del desenfrenado glam que imperaba en el momento.

Porque eso es lo que Time Warp era, una estupenda pieza de glam rock casi de manual, cuya única pega es que se editó en disco cuando se estrenó la película en 1975, en un momento en el que los gustos del público comenzaron a abandonar la brillantina y los maquillajes a go-gó.

Con todo, es el tema que seguramente más ha quedado de todo el musical. Los que han visto The Rocky Horror Show en los cines saben que hay todo un código de participación del público en función del momento de la obra, la cual se acaba convirtiendo en una auténtica fiesta. Pues bien, la parodia de baile de Time Warp ha acabado trascendiendo a los recintos, siendo tremendamente popular en todo el mundo anglosajón incluso en eventos particulares como bodas.

Porque, en el fondo, es simplemente música para divertirse. Ni más, ni menos. 




Hasta la próxima. 


viernes, 27 de abril de 2012

Loaded, Primal Scream, 1990


No sé en qué momento de los noventa la música de baile se echó bastante a perder, pero en sus albores como década prometía muchísimo para los que empezábamos a dejarnos ver por antros de luz oscura y decibelios a toda pastilla. 

Y es que uno de los primeros revientapistas del decenio fue este bombazo del que era imposible despegarse una vez empezaba a sonar. No era una oda al sintetizador a la manera de los ochenta, aunque estaba construido con toda su parafernalia electrónica, eso sí, sumada a la instrumentación propia de un grupo de rock. 

Loaded era un poti-poti (expresión en catalán que significa mezcla, pero a conciencia) en el que una base de baile y un estribillo constante en clave gospel se combinaban bajo los efluvios del ácido más lisérgico en boga entonces. Prácticamente era instrumental: su única letra eran unas palabras del actor Peter Fonda extraidas de la peli Los ángeles del infierno, su primer experimento cinematográfico sobre una Harley Davidson tres años antes de Easy Rider

El tema se convirtió en un éxito total en toda Europa y Estados Unidos. Como nota peculiar, fue avanzado como single ¡19 meses antes! de la publicación de Screamadelica, su álbum de debut y uno de los discos más influyentes de los noventa. La versión en single (la del clip) era tres minutos más corta que la del LP (la de Goear) y, visto en retrospectiva, casi sabe a poco. 

Aunque para versión espectacular la que hicieron en directo ya en 2010, de la que os dejo el link debajo del clip. Os recomiendo que la pinchéis, pero con el volumen bien alto. Veréis que forma de entrar al puente de estos días.



Versión en directo (no os la perdáis)


Hasta la próxima.

jueves, 26 de abril de 2012

Adelante, Lone Star, 1973


¿Por qué he escogido este tema hoy? 

En primer lugar, porque sorprende su increíble potencia para un grupo español de 1973. 

En segundo lugar, porque es una muestra de todo lo que me queda por aprender de la música: aunque pueda parecer extraño (que no lo es) este hit del momento no lo conocía. Sin más. 


En tercer lugar, porque me lo ha recomendado mi amigo Ton, que lo bailaba como un bestia por entonces. Y su recomendación venía dada por lo siguiente.  


Porque en cuarto lugar, hoy SUPERAMOS NUESTRO PRIMER CUARTO DE MILLÓN DE ENTRADAS, y con un título y una letra como ésta, casi no se me ocurre nada mejor para celebrarlo con todos vosotros. 

¡Un abrazo, muchas gracias, y seguimos con las Píldoras en este Territorio Armero!




Hasta la próxima.

miércoles, 25 de abril de 2012

Life In A Day, Simple Minds, 1979


Si hay una canción de los Simple Minds que me gusta casi tanto o más que su gran hit Don't You (Forget About Me) es este Life In A Day con el que los británicos se estrenaron allá por 1979

En realidad, casi cuesta de reconocerlos. Para empezar, su aspecto: nada de trajes amplios o neorromanticismos. Antes bien, todo lo contrario, vemos a una banda dentro del estilo new wave más absoluto, hasta el punto de que hay que esforzarse un tanto en identificar al propio Jim Kerr. 

El sonido también sorprende, mucho más cercano a la frialdad de los Visage (que también empezaban por aquel mismo tiempo) que al del pop comercial con aires más o menos elegantes que acabaría distinguiéndolos pocos años después. 

Pero eran tiempos de post punks y news, y lo puntero era precisamente cargar los sintetizadores de la manera más futurista posible. Así que no era de extrañar que los Simple Minds iniciaran su discografía con un sencillo como éste. 

Aunque sus ventas fueron discretas -puesto 62 en las listas británicas- Life In A Day sirvió para que su álbum homónimo tuviera mejor suerte, hasta el punto de entrar en el Top 30 de LP's. Nada mal para comenzar una discografía que sería una de las más importantes de los ochenta. Aunque, de momento, nos quedamos en estos estertores tan sintéticos de los setenta. Espero que os guste. 




Hasta la próxima.

martes, 24 de abril de 2012

Branquias bajo el agua, Derribos Arias, 1982


Tenéis delante a uno de los himnos más surrealistas de toda la Movida madrileña. Pero no podía ser de otra manera procediendo de una formación en este sentido tan inclasificable como Derribos Arias. 

Mucho más que otros grupos, los Derribos Arias eran obra de su factótum, el cantante Poch. Su propio nombre ya era en sí una declaración casi dadaísta: en realidad, se llamaba Ignacio Gasca, pero su propensión a la mala salud acabó colocándole tan peculiar y "pocho" sobrenombre. 

Curiosamente, el tipo con tanta tendencia a caer enfermo iba para médico, y de los buenos, pero al parecer, la música le tiraba aún más, así que abandonó la carrera para acabar a golpe de notas. Y a fe que durante unos años estuvo en medio del ajo: antes de montar los Derribos había estado nada menos que en los Ejecutivos Agresivos, formación con bastante éxito de la que, además, salió otro monstruo de la época, Jaime Urrutia, para montar los Gabinete Caligari

No se puede decir que Poch tuviera una voz precisamente privilegiada, pero su carisma surrealista -el final de la conversación con Àngel Casas en el clip es de nota- y su creatividad hacían el resto. Branquias bajo el agua, incluida en su primer EP, terminó siendo su pieza más emblemática y aunque nunca llegó a ser en realidad "el baile de actualidad" sí que, durante unos meses, contribuyó notablemente a la transformación del bullicioso pop español de los ochenta. 

¡Inmersión en la pecera!




Hasta la próxima.

lunes, 23 de abril de 2012

Sheep, Pink Floyd, 1977


¡Qué horas! Como suele suceder cuando se me hace tan tarde, solicito vuestra venia para ser breve y retirarme enseguida. Pero no sin antes dejar hoy una Píldora que compensará el menor verbo con la mayor música, tanto en calidad... como en extensión. 

Que Animals fue uno de los grandes discos de Pink Floyd no se le escapará a nadie. Su espectacular puesta en escena, con aquel inmenso cerdo volador hinchable -llamado Algie- ha quedado en la retina de la historia del rock. Por cierto, si habéis visto Hijos de los Hombres -muy recomendable de verdad- lo encontraréis en un entorno un tanto más terrorífico e inquietante: el Londres de un mundo futuro en el que no nacen niños.  

Para mí, el tema más espectacular de todo el álbum era este Sheep, una pieza de diez minutos -se hace mucho más corta- en la que se alternaban fragmentos sinfónicos y progresivos con otros acelerados que daban un toque sutilmente esquizofrénico a todo el conjunto. 

Sin más, me voy a dormir. Al final, no he sido tan breve como anunciaba: la cabra tira para el monte. Pero qué le vamos a hacer. Una última nota: los vídeos (dividen la canción en dos partes) no fueron grabados en óptima calidad, que digamos. Si os desesperan mucho, tirad de la versión del álbum por Goear. Y ya callo. Allá va. 





Hasta la próxima.

domingo, 22 de abril de 2012

Go Where You Wanna Go, The Fifth Dimension, 1966


Los muy puristas tal vez se habrán sorprendido de la elección de la Píldora de hoy, no tanto por el magnífico tema como por sus intérpretes. Y es que Go Where You Wanna Go es, en realidad, una de las canciones más emblemáticas de The Mamas and The Papas

En 1965, el cuarteto de Phillips y compañía -que aquí hemos descrito alguna vez como rosario de la aurora erótico/festivo- lanzó Go Where You Wanna Go como su primer sencillo. Sin embargo, en aquella ocasión, no tuvo mayor repercusión en ventas. 

Algo muy distinto a lo que sucedió un año después con los protagonistas de hoy, The 5th Dimension. Entonces estaban aún a tres años de su mega hit Aquarius/Let the Sunshine In, y para estrenarse como grupo vocal escogieron, precisamente, versionar el tema que tenéis delante. Esta vez el público sí que prestó la debida atención y la composición escaló hasta el puesto 16 del Billboard, posiblemente aprovechando el tirón que para entonces ya tenían The Mamas and The Papas. 

Tengo que admitir que es muy difícil determinar cual de las dos versiones me gusta más, ya que ambas son muestras del mejor pop melódico y vocal de la época. Así que me tenía que decantar por una de ellas: ganó la que finalmente obtuvo el mayor reconocimiento cuando se lanzó. 

Bueno, y también la que tenía videoclip, para qué os voy a engañar. 





Hasta la próxima.

sábado, 21 de abril de 2012

Summertime Girl, Los Íberos, 1968


Puede sonar paradójico, pero para quien escribe, la de hoy es una de las mejores canciones pop de la década de los sesenta en España, aunque fuera concebida en inglés. Pero eran otros tiempos y, mucho más que ahora, utilizar dicho idioma era una forma de reclamar la atención, tanto en el mercado exterior... como en el interior. 

A día de hoy, Los Íberos son poco más que un nombre para la mayoría de personal ajeno al rock español de la época, a diferencia de grupos como Los Brincos o Los Bravos. Sin embargo, justo cuando aquellos comenzaban su cuesta abajo, durante un breve tiempo los protagonistas de hoy ocuparon la vanguardia musical nacional, abrazando la psicodelia más que cualquier otra formación. 

Summertime Girl, editado en 1968, fue su primer sencillo. Hoy es uno de los temas más conocidos del grupo, aunque entonces fue un pequeño fiasco en ventas. Incluso su cara B, Hiding Behind My Smile -con un ritmo bastante funky- tuvo probablemente más repercusión que su cara A, al incluirse poco después en la película musical 1, 2, 3, al escondite inglés (un día traeré el impagable clip de la canción con Íñigo incluido). 

Debo decir que hay un motivo adicional para que Summertime Girl fuese un single en inglés. ¿Recordáis aquel hit de los Rubettes, Sugar Baby Love, que trajimos hace siglos por el blog? Pues bien, sus autores y su productor fueron los mismos que los del primer single de Los Íberos, el par Bickerton-Waddington. Y claro, a estos no los veía yo componiendo en castellano, por más que Spain fuera different. En todo caso, les quedó un tema excepcional. 





Hasta la próxima.

viernes, 20 de abril de 2012

Pyjamarama, Roxy Music, 1973


Los que tenían aquellos dinosaurios a golpe de cassette llamados Spectrum, Amstrad y Commodore 64 a mediados de los ochenta tal vez recuerden a un primitivísimo juego de arcada llamado Pyjamarama. En este, entre gráficos casi abstractos y con colores gritones sobre fondo negro, un tipo (o, mejor dicho, su conciencia, ya que estaba durmiendo) enfundado en múltiples pijamas debía buscar pistas para activar su despertador para no llegar tarde al trabajo por la mañana.

Sin embargo, aquella surrealista historia no era la primera cosa con tan extraño título.  Más de una década antes, los Roxy Music -en plena etapa glam rock- habían lanzado un single llamado precisamente así, aunque el palabroncio no apareciera ni una sola vez en su letra. 

Roxy Music fue uno de los pocos grupos que iniciaron su carrera con inmejorable pie, en un éxito que nunca les abandonaría durante los diez años siguientes. Pyjamarama, lanzado en marzo de 1973, fue su segundo single, y logró entrar en el Top 10, al igual que su antecesor, Virginia Plain. A pesar de que fue concebido como apoyo para su segundo álbum, For Your Pleasure -como nota a pie, la chica de la portada era Amanda Lear, que luego se haría famosa musicalmente en la era disco-, el tema de hoy no fue incluido en su lista de canciones.

Eran otros tiempos y, desde luego, la creatividad debía de sobrar mucho más que ahora.




Hasta la próxima.

jueves, 19 de abril de 2012

Baby, Come Back, The Equals, 1966


Segurísimo que todos recordáis la que posiblemente haya sido la única canción antirracista convertida en tema del verano: Gimme Hope Jo'anna. Con ella, el guyanés Eddy Grant conseguía el que sería probablemente su hit más conocido, a finales de los años 80. 

Sin embargo, para entonces, era todo un veterano con más de veinte años de carrera cargados a sus espaldas... y numerosos éxitos en su momento tan conocidos como su animoso alegato contra el apartheid. De hecho, estoy seguro que en cuanto le deis al play -aquellos que no hayais reconocido la canción sólo por el título, naturalmente-  os será inevitable rememorar su estribillo. 

Efectivamente, Baby, Come Back fue el primer gran exitazo de Grant, entonces junto a su grupo del momento, The Equals, en los que tocaba la guitarra eléctrica. Sí, cuesta algo de reconocer sin las rastas, pero ahí está. 

De todas maneras, cuando se lanzó el single en 1966, sus ventas fueron algo discretas. Tuvo que ser una segunda reedición ya en 1968 cuando recibió la atención de las principales emisoras y tuvo una suerte, digamos, un poco mejor: se plantó en el número uno nada menos que en Gran Bretaña, y durante tres semanas. Con el renovado impulso de la carrera de Grant en los ochenta, volvería a relanzar el tema -regrabado- en varias ocasiones, aunque ya en ninguna con tanto impacto como veinte años atrás. 

Así que hoy os quedáis con un tema para ir abriendo el fin de semana con buen ánimo. ¿O no es así?




Hasta la próxima.

miércoles, 18 de abril de 2012

Mustang Sally, Wilson Pickett, 1966


Tras el breve paréntesis musical-indignado de ayer, he decidido arremeter con el mejor ánimo (a pesar de la continuación de desastres noticieros) el tramo final del día de hoy. Y pocos mejores que aquella apisonadora soul llamada Wilson Pickett

Como creo ya haber referido, para quien escribe, mucho más que Otis Redding o Sam Cooke, incluso más que James Brown, el auténtico rey del soul ha sido Pickett con diferencia, con su estilo poco menos que brutal. Pocos singles suyos pueden considerarse mediocres: incluso versionando, conseguía transformar los originales en algo totalmente distinto... y arrollador. Un día pasaré las interpretaciones que hizo del Hey Jude de los Beatles, y del no menos clásico Hey Joe popularizado poco antes por Jimi Hendrix. Ya veréis, ya. 

Mustang Sally fue uno de sus mayores hits. Lanzado a finales de 1966, recogía un tema compuesto por un antiguo compañero suyo de su etapa con The Falcons, Mack Rice. Éste ya había grabado un año antes la pieza, aunque sería de la mano de Pickett con quien alcanzaría unas ventas muy considerables. 

Curiosamente, estuvo a punto de no ver la luz una vez grabado. La causa no fue ningún capricho del artista, que, antes bien, había quedado más que satisfecho del resultado. Por lo visto, el máster se enganchó en el carrete, y la cinta quedó destrozada. Tuvo que ser uno de esos artesanos del oficio musical, el mítico ingeniero Tom Dowd, quien tranquilizara a todos cuando se llevó los restos a un cuarto y los devolvió recompuestos al cabo de un rato. 

Una historia con final feliz, pero de esas que lo llevan asociado a un "¡uff!" audible a kilómetros. Así que fue de un pelo, pero gracias a Dowd hoy podéis disfrutar con esta pura dinamita en las Píldoras.





Hasta la próxima. 

martes, 17 de abril de 2012

Para la libertad, Joan Manuel Serrat, 1972


Cuando Serrat musicó a Miguel Hernández, poeta comunista muerto bajo los primeros compases del franquismo, se estaban caminando los primerísimos compases de la Transición democrática, esa que hoy se contempla como un tótem por todos pero que entonces sólo algunos concebían honestamente. El régimen agonizaba a la par que el Caudillo: la mera coexistencia de discos como éste o el que el mismo Serrat dedicaba tres años antes a Antonio Machado junto a las últimas cargas policiales -y las postreras sentencias de muerte- era la señal de que la bestia daba sus últimos golpes de cola en mitad de una sociedad harta del plomo gris de los años pasados. Era un camino hacia la libertad y hacia la construcción de un mundo mejor. 

Y viendo las noticias de estos últimos días, semanas y meses, ¿no os da un tanto la sensación de que estamos recorriendo el mismo camino exactamente a la inversa?

Así que no me digáis por qué, pero lo único que me apetecía poner hoy era este fantástico Para la libertad tal y como Serrat lo entendió en 1972. Aquellas eran letras, aquellos eran tiempos, pardiez. 




Hasta la próxima.

lunes, 16 de abril de 2012

Take My Breath Away, Berlin, 1986


Uno de los bombazos musicales más recordados del años 1986 estuvo vinculado a una de aquellas pelis que hicieron propaganda como pocas de la política exterior de la era Reagan (parece ser que se multiplicaron las peticiones a alistarse en la aviación tras su estreno), enmascarada en una historia de amor. Porque ¿quién no vio entonces Top Gun?

Siempre he considerado a aquel film -más allá del mensaje encubierto que llevaba- como una especie de sucesión de videoclips enlazados por una trama que era casi lo de menos. En descargo, debo decir que la selección musical incluida no era del todo mala, con algunos de los temas y artistas más populares de mediados de los ochenta. 

Aunque, de largo, la canción que más trascendió de todas fue obra de unos casi perfectos desconocidos hasta entonces. Hasta aquel momento, la carrera de los californianos Berlin había contado con discretos resultados, a pesar de que llevaban en el candelero desde nada menos que 1978

Para el film, el productor Giorgio Moroder, el mismo que había contribuido como pocos a elevar a la música disco de los setenta hasta el olimpo de las ventas, compuso el principal tema de amor, que cedió al dúo afincado en Los Ángeles. Y, en una simbiosis casi perfecta entre música y película, consiguió quedar tanto en la mente de los espectadores como el propio Tom Cruise o los cazas F-14 en misión. Casi huelga decir que se elevó hasta el número uno en casi todas partes. 

No me diréis que el de hoy no ha sido un flash-back total.





Hasta la próxima.

domingo, 15 de abril de 2012

Somewhere In My Heart, Aztec Camera, 1988


Ayer comentábamos la pésima calidad de los charts de los últimos años, en un intento desesperado por rescatar algo decente de toda una mañana de escucha. Sin embargo, esto no ha sido siempre así, por suerte para los que empezamos a tener algún año que otro.

No es que 1988 fuera la panacea musical comparado con otros años, pero desde luego fue estratosféricamente superior a cuanto maltrató a mi pobre cadena musical durante varias horas. Por ejemplo, hacia junio de aquel año era fácil escuchar en cualquier momento del día canciones como Perfect, de Fairground Attraction, The King Of Rock 'n' Roll de Prefab Sprout, Everyday Is Like Sunday de Morrissey o Love Will Save The Day de Whitney Houston. Cierto es que también habían cosas menos glamourosas como aquella versión del Twist de los Fat Boys (muy divertida, por otra parte) o el Boys, boys, boys de Sabrina (también harto divertido por sus propias razones). Bien pensado, no fue un mal año del todo. 

Uno de los sencillos que a principios de aquel verano sonaron más fue este Somewhere In My Heart de los Aztec Camera. En 1983 habían obtenido un éxito importante con Oblivious, aunque desde entonces sus ventas fueron algo discretas. En 1987 lanzaron Love, un álbum con evidente orientación comercial, destinado sobre todo al mercado norteamericano. Finalmente, no llegaron a conquistarlo, pero el esfuerzo no fue en vano: el single alcanzo el tercer puesto en el Reino Unido (el mejor de su carrera) y el LP incluso fue nominado a mejor disco en los Brits Awards de 1989, que perdió precisamente ante Fairground Attraction

Una característica de los Aztec Camera es la cantidad de gente que pasó por ellos y que colaboró en sus discos: Ryuichi Sakamoto, Paul Carrack o Mick Jones fueron algunos de los nombres ilustres que se vincularon alguna vez a la formación escocesa. O el bajista que podéis ver en el clip, bien conocido para los amantes del jazz, nada menos que Marcus Miller. 

En fin, una muestra más de que buena música y estilo comercial no tienen porque ir necesariamente reñidos. Solamente hay que querer echarle un poco de talento a la cosa.
 



Letra de la Píldora.

Hasta la próxima.

sábado, 14 de abril de 2012

El secreto de las tortugas, Maldita Nerea, 2007


En ocasiones, por algún motivo que desconozco conscientemente, en la cadena de casa aparece alguna emisora de esas que basan su radiofórmula en los temas del momento o, como mucho, del último lustro. Por lo general, cuando esto sucede, el cambio de dial es inmediato, consciente de la pésima calidad del grueso de lo que se considera actualmente mainstream, casi invariable en su estilo durante los últimos quince años. 

Sin embargo, hoy ha sido la excepción, y he decidido mantener la escucha. Voto a bríos que lo mío me ha costado, abrumado por una sucesión monótona a matar de temas del peor pop, fuera anglosajón, latino, de aires soul o hip hop. 

Sobre gustos no hay nada escrito, y los míos son los más discutibles, pero sí que sé distinguir entre la música buena y la mala, entre otras cosas porque yo escucho habitualmente de los dos tipos y los disfruto según el momento. Pues bien, la sucesión de canciones salidas hoy por la radio no podía ser más mediocre. Supongo que la pasta se va toda en la promoción, así que no debe de quedar ni un duro (perdón, ni un euro) para que alguien haga algún buen trabajo compositivo y de cuidada producción. 

Uno de los escasísimos temas con los que me quedo de cuantos salieron fue este El secreto de las tortugas de los Maldita Nerea, y que contó en su día con la colaboración de los jerezanos Los Delinqüentes. Entre tanta medianía musical, era casi conmovedor oír alguna cosa más que decente. Supongo que sería porque además de tratarse de un buen tema, es de esas canciones que digo que tienen "efecto velocidad" -vamos, que cuando las oyes en el coche apetece pisar un poco más el acelerador-. Tampoco descartaría el "efecto simpatía", aún más irracional: a lo mejor también contó el hecho de que su grupo tiene como emblema una tortuga muy parecida a la que llevo de colgante, a saber.

Como sea, aquí os dejo con lo único que salvaría de una tristísima mañana musical. 

El secreto de las tortugas - Maldita Nerea (por Grooveshark)



Hasta la próxima.

viernes, 13 de abril de 2012

Tribulations, LCD Soundsystem, 2005


¿Qué mejor para iniciar un fin de semana que un poco de electrónica de la buena? Y de la mano de uno de los grandes del gremio en la última década, los neoyorquinos LCD Soundsystem. 

Como tantas otras formaciones creadas al calor de clubs, empezó a ser conocida a golpe de sencillos que fueron ganando cada vez más la atención de los diferentes Dj's a ambos lados del Atlántico. A pesar de que desde 2002 llevaban editando sencillos (en buena parte gracias a que uno de sus miembros había creado su propio sello), fue en 2005 cuando dieron su gran salto a un público más amplio. 

Aquel año editaron su primer LP, llamado como el grupo, y que incluía buena parte de su trabajo anterior. Su primer single de apoyo, Daft Punk Is Playing At My House se convirtió en todo un éxito, que fue continuado por los lanzamientos siguientes, entre ellos este Tribulations que estoy más que seguro que lo habréis escuchado unas cuantas veces. 

Tampoco os perdáis el clip, todo un desconcertante paseo de realidad... y de realidad aumentada. En fin,  que ahora no tenéis excusa para no empezar este viernes por la noche con marcha y buen rollo. A pasarlo bien, muchachada.




Hasta la próxima.

jueves, 12 de abril de 2012

Jackie Cane, Hooverphonic, 2001



La historia de Ziggy Stardust, la ficticia estrella del rock cuyo áuge y caída había glosado David Bowie de manera gloriosa hace ahora precisamente cuarenta años, ha servido de modelo para numerosas otras rock stars no menos ficticias desde aquel 1972. En todos los casos, el rol ha sido muy parecido: tras tocar el cielo, todas ellas pasaron por un calvario con un final que en ocasiones resultaba ser trágico.

Así, nos encontramos al Ray Lomas que Jethro Tull hicieron famoso poco después en su épico Too Old To Rock ‘n’ Roll: Too Young To Die! o, ya mucho más recientemente, al Strickland Banks que Plan B puso en el número uno en 2010 con su hit She Said.

Otro miembro de esta ilustre colección de personajes es la Jackie Cane que crearon en 2000 los Hooverphonic  en su álbum Magnificient Tree. No obstante, no fue concebida inicialmente como protagonista de un disco. De hecho, Jackie Cane (como canción) era una pieza más de aquel estupendo trabajo.

Sin embargo, debieron ver un cierto filón en el personaje, así que el siguiente LP de la formación belga se lo dedicaron por completo, y lo titularon Hooverphonic presents Jackie Cane, nada menos. De todas maneras, paradójicamente, en el nuevo disco no volvieron a incluir la canción al entender que no era necesario.

Espero que os guste. Y no os cuento el final de la historia del personaje: escuchad el disco. Merece la pena. 





Hasta la próxima.

martes, 10 de abril de 2012

Wave Of Mutilation, Pixies, 1989


La de hoy no iba a ser una Píldora express -una vez acabado el breve asueto semanasantero- pero,  viendo las horas que son, casi que el resultado será el mismo en su parquedad, concededme la licencia. 

De todas maneras, os dejo con una de mis piezas favoritas de los Pixies, Wave Of Mutilation, incluida en su formidable Doolittle, otro de aquellos discos tan mercadeados en mi instituto hacia el cambio de los ochenta a los noventa. Álbum que, por cierto, se lanzaba más o menos por estas fechas... de 1989, precisamente. 

Tal vez veinte años no son nada, pero veintitrés, diría que sí, uf. Nos vemos en la próxima.





Hasta la próxima.

lunes, 9 de abril de 2012

Don't Give Up, Peter Gabriel & Kate Bush, 1986


Quinta píldora express. Dedicada a toda la buena gente que está pasando por un momento complicado y, especialmente, a mi hermanita. Seguro que pasará: ¡nada de rendirse!




Hasta la próxima.

domingo, 8 de abril de 2012

Young Folks, Peter Bjorn and John, 2006


Cuarta Píldora express. Tengo que admitir que este tema, durante bastante tiempo, me daba un poco de rabia con ese silbidito machacón y un vídeo que, de tan modernillo, me parecía casi tonto. Sin embargo, con el tiempo he ido ganándole el gusto y, finalmente, he conseguido escucharlo entero de una tacada. ¿Y sabéis qué? No me parece tan malo. Seguro que lo habéis escuchado bastante, pero, en todo caso, aquí os lo dejo para que le déis al play una vez más. Eso, por supuesto, si a vosotros no os sigue dando rabia.




Hasta la próxima.

sábado, 7 de abril de 2012

Out From The Deep, Enigma, 1994


Tercera Píldora express. Ayer, en la enésima visita al Museo de la Ciencia (desde niño es uno de mis rincones favoritos) vimos un 3D sobre la selección natural en el Planetario. Valga decir que fue espectacular: los efectos de vuelo eran tan reales que acabé hasta con ese encogimiento de barriga propio del que está suspendido a gran altura. Un momento muy chulo fue un repaso a la evolución de las especies mientras sonaba de fondo este estupendo Out From The Deep de Enigma. Al final, en un punto surrealista, ¡un hombre de las cavernas avanzaba por la imagen tocando una guitarra eléctrica!

En fin, os dejo con esta estupenda canción. Pero no sin una última reflexión en voz alta. El Museo de la Ciencia es un recinto pensado para divulgar ciencia para chavales y jóvenes. No para bebés o infantes de guardería, más que nada porque los pobrecitos no entienden nada de allá. Lo digo por la legión de papás y mamás que utilizaron el Museo (ya se sabe, día nublado de vacaciones) como una especie de kindergarden plagado de quejidos varios producto del evidente aburrimiento de sus hastiadísimos vástagos. No exagero: volvimos de allí cansados como si hubiéramos pasado un día subiendo montañas.

Ahí queda.




Hasta la próxima.

viernes, 6 de abril de 2012

I've Been Thinking About You, Londonbeat, 1990


Segunda Píldora express. La de hoy está especialmente dedicada a los que como un servidor, empezábamos a pasarlo bien bailoteando (o haciendo el pato mareado, bendita época sin cámaras de móvil) en las pistas de la época. Con I've Been Thinking About You, los Londonbeat se marcaron su gigantesco hit en todo el mundo, copando varias listas de éxitos en el tramo final de 1990. Una de ellas era la española, lo cual puedo atestiguar por las decenas de veces que sonaba esto de día... 

... y de noche. 






Hasta la próxima.

jueves, 5 de abril de 2012

California Man, The Move, 1972


Como es habitual por estas fechas, nos tomamos unas pequeñas vacaciones por bien que aseguraremos el suministro de Píldoras en su formato express. Para comenzar lo haremos con un tema muy inspirado por el post de ayer, rock and roll puro en su modalidad años setenta. De hecho, entre ambas canciones apenas hubieron unas pocas semanas de diferencia en el ya lejano 1972

Ya conocemos al bueno (y extravagante) de Roy Wood gracias a su trabajo con los Wizzard, su gran proyecto de aquella misma década por bien que lo fue de manera inesperada y bronca. Durante los sesenta y principios de los setenta, había liderado al exitoso grupo The Move, aunque con su compañero de formación Jeff Lynne ya había iniciado el proyecto que realmente quería planificar para el futuro: la Electric Light Orchestra. Con todo, su colaboración conjunta en la ELO duraría poco: Lynne se haría con el control y Wood se marcharía a formar los Wizzard. 

California Man tiene la peculiaridad de ser el último sencillo de The Move. El siguiente single, 10538 Overture ya se lanzaría bajo el nombre de la ELO. Tuvo muy buenas ventas, atestiguadas por el séptimo puesto que obtuvo en las listas británicas, entonces en plena fiebre glam rock. Y es que, como se puede ver, hace cuarenta años aún había mucho espacio para escuchar buen rock and roll en la radio. 

¡Felices vacaciones!

California Man - The Move (por Grooveshark)



Hasta la próxima.

miércoles, 4 de abril de 2012

Rock And Roll, Led Zeppelin, 1972


Rock and Roll es, para quién escribe, uno de los temas más trepidantes y electrizantes que nunca ha escuchado. Tal vez no sea el más duro dentro de la estela del heavy metal, desde luego no es el más original, pero resume como pocos otros la energía arrolladora de esa cosa que gustamos llamar precisamente así, rock and roll. 

Probablemente por esto mismo, los Led Zeppelin nunca dejaron de tocarla en directo en sus conciertos, aunque, si me dejáis formular una opinión que para algunos puede ser poco menos que herética, ninguna de sus interpretaciones en vivo (al menos las que he escuchado) consiguió transmitir el mismo aroma a gasolina quemada de su versión en estudio. 

Ésta fue publicada por primera vez a finales de 1971 en su famosísimo -y vendidísimo- cuarto álbum, aquel sin nombre y que todos llamaron "Led Zeppelin IV" o, simplemente, "Zoso", por el peculiar símbolo esotérico que en él aparecía. Poco después, ya a inicios de 1972, tuvo su oportunidad como single, con unos resultados realmente buenos. Curiosamente, en España fue donde obtuvo uno de sus mejores puestos en listas (el 14): y es que en mitad de la gloria del 600 y del 850 no todo era Manolo Escobar o Fórmula V.

Rock and Roll es un tema sin demasiadas complicaciones musicales, lo cual lo convierte en el fondo en una perfecta pieza de referencia que permite constatar que, en realidad, el rock duro y el heavy metal lo deben casi todo al blues. Y tal vez por esto, sólo una banda que se había curtido en el blues rock de los sesenta podía hacer un tema como éste. 

Un tema que, de postre, es uno de los más influyentes de las últimas décadas. No sólo por las consabidas listas del Hall Of Fame y todo eso, en las que no falta. Yo mismo atestiguo este efecto en cuanto asocio este tema a un viejo conocido de muchos años atrás y al que hace la intemerata que no veo. No era ni heavy, ni rocker, ni nada por el estilo: lo suyo era el hip hop, y le recuerdo un gran fan de los Cypress Hill -un día los pondré-. Pues bien, como buen batería, era de lo más habitual verle tocar los primeros compases de Rock and Roll. Ahí queda.




Letra de la Píldora.

Hasta la próxima.

martes, 3 de abril de 2012

Learn To Lose, Hockey, 2009


Aunque ni el nombre de la canción ni el nombre del grupo pueda decir mucho a la mayoría, estoy bastante seguro de que el tema de hoy os sonará algo cuanto menos, especialmente si os gusta la cerveza. 

Porque, efectivamente, Learn To Lose puso música a uno de los anuncios de una cervecera madrileña el año pasado. Y, ya se sabe, eso tiene siempre su efecto en las ventas, tanto de una cosa -una birrita fresquita- como de la otra -un disco-. 

Con todo, no es el único ejemplo de que los Hockey, una banda norteamericana de rock alternativo con especial éxito en Gran Bretaña, le debe bastante de las ventas de su único álbum a la atención de un más o menos inspirado publicista. Too Fake, su primer single, tuvo también unas buenas ventas gracias a acompañar a un anuncio de una cadena de Estados Unidos. 

Hay quien opina que estas cosas suelen "vender" a las formaciones indies, pero qué carajo: en el fondo, ¿a quién no le gusta colocar (bien) a su música? Va una cervecita por vosotros.




Hasta la próxima. 

lunes, 2 de abril de 2012

I'm Yours, Jason Mraz, 2008

Hoy no me extenderé ya que tengo el cuerpo un poco más para allá que para acá, pero no quería dejar de pasar la Píldora de hoy. Y como no era cosa de pensar demasiado -imagino que mis maltrechas neuronas están intentando reestablecer el orden- he recurrido a uno de los personajes del día, Jason Mraz, que lo ha sido por la gracia y arte de la promoción de un nuevo disco. 

Las cosas como son, a mí, este Jason Mraz nunca me ha dicho ni fu ni fa, pero reconozco que I'm Yours tiene su gracia. Una opinión en la que debieron coincidir los millones de personas que pusieron al tema en el número uno en 2008 en bastantes paises, entre ellos España. 

Y sin más, os dejo, que mandan retreta. A ver si mañana hay mejor cuerpo. Ciao!

I'm Yours - Jason Mraz (por Grooveshark)




Hasta la próxima.

domingo, 1 de abril de 2012

We Are The People, Empire Of The Sun, 2008


Los que sois -como yo- muy fans de los MGMT en seguida habréis reconocido a los protagonistas de hoy. Porque sí, también son dos, también les va el pop de aires psicodélicos, alternativos y hasta electrónicos... y también son poco dados a editar discos con cuentagotas. 

Empire Of The Sun -esto sí es una diferencia- proceden de Australia, y se trata del dúo formado por Luke Steele y Nick Littlemore. De hecho, uno de los dos protagonistas ya pasó por aquí inadvertidamente: Steele es uno de los miembros de The Sleepy Jackson, aquel grupo que un día descrubrí gracias al Spotify en pleno zafarrancho de aspiradora y escobón.

Como sea, Steele y Littlemore se conocían desde al menos el año 2000, aunque hasta 2008 no decidieron hacer un trabajo de larga duración conjunto, ya bajo el nombre de Empire Of The Sun. Aquel disco, titulado Walking On A Dream, se convirtió insospechadamente en un superventas no sólo en su Australia natal, si no en buena parte de Europa. 

Uno de los singles que consiguieron más éxito fue este We Are The People, que alcanzó como máximo galardón un nada despreciable puesto decimocuarto en Gran Bretaña... hasta 2010. Como ya sabemos todos los que frecuentamos este blog, la publicidad suele hacer estragos, y aquel año una proveedora de telefonía usó el tema como sintonía en Alemania, lo cual fue como una varita mágica que le dio nada menos que el número uno en el país teutón. 

Espero que os guste. De hecho, si os gustaron los MGMT, estoy seguro de que también lo harán este par.



Letra de la Píldora.

Hasta la próxima.