En más de una ocasión, y de dos, he insistido en el hecho de que este blog es posible por el concurso de todos los que lo leéis y participáis en él. Y no sólo porque con vuestra presencia (a veces visible y otras veces sólo manifestada por la creciente velocidad del contador de visitas) este redactor se anime a escribir en la medida de lo posible día sí y día también, si no muy particularmente por vuestros comentarios y sugerencias.
Éstas sugerencias son mucho -pero mucho- más importantes de lo que os podáis imaginar. Ciertamente, quien os escribe tiene pasión por la música, pero no infalibilidad ni omnisciencia, con lo que requiere de una constante fuente de influencias para no acabar poniendo tan sólo aquello que ha escuchado un millón de veces por raro que parezca. Influencias que a veces entran con más celeridad y a veces con menos, pero que nunca se olvidan pues son las que me permiten sostener esta aventura con un mínimo de consistencia.
Y aquí entra el porqué de la Píldora de hoy. Uno de nuestros más antiguos e ilustres seguidores, Paquito Franco -al que podéis leer en numerosos comentarios-, es de los que se toman la molestia de plantear nuevos horizontes y posibilidades de posts a las Píldoras, junto a otros no menos ilustres como Mercè, el Salmón, jmsolis, Juan José Soriano o el Maestro Ciruela. Para quien crea que el tal Paquito se dedica a sugerir pasodobles o marchas legionarias en virtud de su atípico perfil, debo decir que nada hay más lejos de la realidad.
De hecho, que hoy podáis disfrutar de este magnífico tema a golpe de jazz se lo debéis agradecer a él más que a quien escribe, que hasta hace dos días ni sabía de su existencia (¡ante mi horror por mi ignorancia al ver que se trataba de todo un exitazo, cuyo álbum había obtenido cuatro discos de platino en Italia!).
Una de las características que más llaman la antención del italiano Mario Biondi es que hasta que no lo ves, te crees que es negro, negrísimo, a juzgar por su tremendamente profunda voz. Muy posiblemente, This Is What You Are es su tema más conocido, una arrebatadora composición con cierto regusto brasileño, que grabó originalmente en 2004 como single para el mercado japonés. Algún tiempo después, lanzó el álbum Handful Of Soul, junto al High Five Quintet, con los que volvió a plantear la canción. Es la versión que podéis degustar hoy.
Por lo demás, es una magnífica forma de cruzar las 50.000 entradas en las Píldoras, apenas un mes y medio después de pasar las 40.000. Nunca me cansaré de repetirlo: ¡muchas gracias a todas y a todos!
Éstas sugerencias son mucho -pero mucho- más importantes de lo que os podáis imaginar. Ciertamente, quien os escribe tiene pasión por la música, pero no infalibilidad ni omnisciencia, con lo que requiere de una constante fuente de influencias para no acabar poniendo tan sólo aquello que ha escuchado un millón de veces por raro que parezca. Influencias que a veces entran con más celeridad y a veces con menos, pero que nunca se olvidan pues son las que me permiten sostener esta aventura con un mínimo de consistencia.
Y aquí entra el porqué de la Píldora de hoy. Uno de nuestros más antiguos e ilustres seguidores, Paquito Franco -al que podéis leer en numerosos comentarios-, es de los que se toman la molestia de plantear nuevos horizontes y posibilidades de posts a las Píldoras, junto a otros no menos ilustres como Mercè, el Salmón, jmsolis, Juan José Soriano o el Maestro Ciruela. Para quien crea que el tal Paquito se dedica a sugerir pasodobles o marchas legionarias en virtud de su atípico perfil, debo decir que nada hay más lejos de la realidad.
De hecho, que hoy podáis disfrutar de este magnífico tema a golpe de jazz se lo debéis agradecer a él más que a quien escribe, que hasta hace dos días ni sabía de su existencia (¡ante mi horror por mi ignorancia al ver que se trataba de todo un exitazo, cuyo álbum había obtenido cuatro discos de platino en Italia!).
Una de las características que más llaman la antención del italiano Mario Biondi es que hasta que no lo ves, te crees que es negro, negrísimo, a juzgar por su tremendamente profunda voz. Muy posiblemente, This Is What You Are es su tema más conocido, una arrebatadora composición con cierto regusto brasileño, que grabó originalmente en 2004 como single para el mercado japonés. Algún tiempo después, lanzó el álbum Handful Of Soul, junto al High Five Quintet, con los que volvió a plantear la canción. Es la versión que podéis degustar hoy.
Por lo demás, es una magnífica forma de cruzar las 50.000 entradas en las Píldoras, apenas un mes y medio después de pasar las 40.000. Nunca me cansaré de repetirlo: ¡muchas gracias a todas y a todos!
Mario Biondi – This Is What You Are (por Spotify)
Letra de la Píldora.
Hasta la próxima.
este Mario Biondi es estupendo...http://fanclub.mariobiondi.com/
ResponderEliminarpara quienes sientan curiosidad por descubrir a este italiano
Un familiar y su pareja , que es de Italia, me habían hablado hace pocos años de pasada, de un italiano que cantaba como Barry White. La cosa no pasó de aquí, pero casualmente, hace diez días me volvieron a mencionar el asunto y ya decidí buscar en la red, alucinando al descubrir entre otros, este temazo que ahora pones aquí. ¿Y dices que lo recomendó Paquito Franco? Pues este tío se esta redimiendo de su pasado si sigue así, ¡jajajaja!
ResponderEliminar¡Me recuerda al Michael Caine!
¡Eso de que que se parece a Michael Caine ya lo decía yo en mi artículo de urgencia, españoles!
ResponderEliminarAlberca, veo que le ha gustado Biondi, de lo que me alegro. El otro día olvidé mencionarle y también a Mercé, que Carmen y yo, estamos que no defecamos con Benjamin Biolay. Es más, es que cuando le escuchamos en "Padam" intento imitarle en sus movimientos, lo que pasa es que me pego unas leches que no quieran ustedes ver...
¡¡Padam España!!
Jajajaja La imagen no tiene precio!!
ResponderEliminarBueno, familia, aquí está Mario Biondi: lo prometido es deuda y, en este caso, pagada con mucho gusto. Por lo demás, Bacalao, ¡deberías darte un voltio por estos lares para saber hasta qué punto Su Excelencia se está redimiendo, ja, ja, ja!!!
ResponderEliminarPor lo demás, Excelencia, tenga vuecencia cuidado con todos esos espasmos: ahora que le estamos recuperando, no vaya usted a hacerse daño, hombre, por más gracioso que le sea a Mercè... le recomiendo que siga el ritmo con la mano a lo "españoles todos", que por nosotros, ya nos damos por muy contentos...
¡Padam, Padam, Padam!