miércoles, 6 de enero de 2010

Rain and Tears, Aphrodite's Child, 1968


¿Qué tienen que ver personajes tan diversos como el músico vanguardista Vangelis, el azucarado cantante Demis Roussos y el compositor barroco alemán Johann Christoph Pachelbel? Pues nada menos que uno de los hits más célebres del 68 europeo, empezando por Francia (país donde se grabó) y siguiendo por otros lugares como Italia o España.

Por partes, que diría el castizo. Evangelos Odysseas Papathanassiou (afortunadamente, más conocido como Vangelis) formaba junto a Demis Roussos y Loukas Sideras un grupo creado incidentalmente en Francia pero procedente de Grecia, y de nombre evocador: Aphrodite's Child. Por su parte, de forma más bien involuntaria, Pachelbel les otorgó con su célebre e impresionante Canon la base musical del que a la postre sería el mayor éxito del grupo, este magnífico Rain and Tears.

Así que ya tenéis desfecho el entuerto. Por lo demás, las carreras de los tres elementos en cuestión fueron de lo más diverso. Por empezar por Vangelis, se convirtió en el conocido compositor de música electrónica, y de bandas sonoras como las de Carros de Fuego (1981), Blade Runner (1982) o 1492: la conquista del paraíso (1992). Personalmente recuerdo más aún sus piezas utilizadas en la serie Cosmos de Carl Sagan, especialmente la enorme Alpha. Por cierto, un asteroide lleva su nombre.

En cuanto a Demis Roussos, seguramente es el más conocido de los tres por parte de vuestros padres. Su carrera como cantante melódico fue meteórica en los años setenta, siendo especialmente recordado (junto a sus túnicas) sus hits Forever and Ever y We Shall Dance. En cuanto al pobre Pachelbel... compuso un Canon que garantizó el éxito a todo aquel que lo versionó o simplemente se inspiró en él. Eso es trabajar por el bien de la Humanidad, desde luego.

El tema de hoy lo he escogido por su singular tristeza, que es, más o menos, la misma que tiene quien esto suscribe tras su merecido descanso navideño, y apura sus últimas horas de vacaciones sumergido en una tremenda melancolía. Vamos, que mañana toca madrugar... pero como decía aquella tremenda mujer:

Pourvu que ça dure!





Letra de la Píldora.

Hasta la próxima.

7 comentarios:

  1. Juan José Soriano7 de enero de 2010, 23:55

    Acaban de emitir en 8tv "Rebelión en el fuerte", con Alan Ladd de protagonista.

    El Maestro Armero sabe por dónde voy.

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  2. Hombre, me coges un poco de improviso... lo primero que se me ocurre es que el hijo de Ladd (ese mítico pistolero tamaño Airgam Boys) produjo Blade Runner... coño, qué diver, ¡es como un Trivial! ¿Es eso?

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  3. Debe de ser una referencia directa de la peli, pero como no la he visto, sólo lo puedo relacionar de manera indirecta como Javi. En este caso, otra "Ladd":a Cheryl Ladd de los Ángeles de Charlie (otro filón musical: el de las bandas sonoras...)

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  4. Por cierto, Cheryl Ladd creo que lleva ese apellido porque estuvo casada (o está, no sé) precisamente con un hijo de Alan Ladd, si no me equivoco... ya ves, todo queda en casa.

    ¿Qué banda sonora propones para empezar?

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  5. No, no, propón tú... El enigma Ladd sigue en el aire, Juanjo no ha dicho nada más...

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  6. Juan José Soriano11 de enero de 2010, 18:10

    A veure, nois i noies. No hay ningún enigma Ladd, ninguno en absoluto.

    Simplemente, como el Maestro Armero es dado a las pinceladas nostálgicas en este blog, pensé que recordaría las críticas cinematográficas de Eduardo de Vicente en el fenecido programa radiofónico "Arús con leche" cuando el prota de la peli era Alan Ladd.

    Especialmente, sus comentarios sobre la permanente del caballero (hecho empíricamente demostrable) y sobre sus preferencias de pareja (conjetura supongo que nacida a partir de la permanente del susodicho).

    Por cierto, Mercè, ¿es cierto que hacéis una exposición de un chino en la fundación? Lo he visto anunciado en el diario (Como observarás, soy todo un gourmet del arte).

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  7. Enorme sensibilidad artística, muchacho... viene a ser como si en la exposición del British Museum sobre el emperador Adriano -que pude ver in situ, buenísima- la hubiera calificado como una muestra sobre "un romano". Menos mal que Mercè ya nos va conociendo a unos y a otros...

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